Tómate un día libre
Cada mes o dos meses, tómate un día en el que no hagas absolutamente nada.
Tal y como lo harías si tuvieras gripe, sólo que hazlo cuando no te sientas enfermo (a).
Apaga los teléfonos; desconecta la computadora.
Si es necesario, permanece en casa todo el día. Haz lo menos posible.
Sólo quédate quieto (a) y dale chance a tu cuerpo y mente de que sanen profundamente.
Si estás casado (a), si vives con tu familia o amigos puedes incluso alternar días de quietud:
uno de ustedes puede cuidar completamente del otro, incluyendo comidas en la cama y después cambiar.
De ser posible, abstente de ver televisión u otras distracciones.
Solamente permanece quieto (a), y dale un descanso de 24 horas a todo tu ser, incluyendo tus sentidos.
Arjuna Ardagh– Leap before you look
Comparte este artículo

Testimonios