En ocasiones, las metáforas pueden ayudarnos a entender y aprehender (así con “h”) mejor alguna enseñanza, concepto o práctica. En esta ocasión, les presento una metáfora de la atención plena, que tiene que ver con el omnipresente correo electrónico. Espero te resulte de utilidad: ” Me atrevería a pensar que no revisas TODOS los correos basura que recibes. Si así fuera, lo más probable es que ocuparas el día entero fascinado (a) por las ofertas de Viagra, premios no-reclamados y diversos métodos para hacerte rico (a). En vez de leer cada correo con fascinación, rápidamente lo reconoces como correo basura o lo ignoras. Mejor aún: tienes un programa que lo hace por tí. La atención plena (mindfulness) hace exactamente lo mismo que hace tu bloqueador de correo basura a tu bandeja de entrada. Al practicar mindfulness, te familiarizas con el funcionamiento de tu propia mente. Al hacerlo, puedes reconocer rápidamente tus “pensamientos basura” cuando ocurren, desengancharte de ellos y minimizar el “tiradero”. Al desarrollar el hábito de no dejarte seducir por cada pensamiento que surge en tu mente, los “pensamientos basura” se vuelven visitantes menos frecuentes, como si estuvieras “cancelando tu suscripción” a listas de correo basura” Arnie Kozak– “Wild Chickens and Petty Tyrants: 108 Metaphors for Mindfulness”